El Beneficio De Las Pruebas.
Aunque parezca muy contradictorio, el pasar por dificultades debería ser motivo de alegría y felicidad.
El apóstol Santiago afirma esta postura al escribir en su carta el beneficio de atravesar por diversas dificultades.
“Hermanos en Cristo, ustedes deben sentirse muy felices cuando pasen por toda clase de dificultades. Así, cuando su confianza en Dios sea puesta a prueba, ustedes aprenderán a soportar con más fuerza las dificultades. Por lo tanto, deben resistir la prueba hasta el final, para que sean mejores y puedan obedecer lo que se les ordene.” (Stg 1:2-4, TLA)
Cada dificultad o adversidad tiene un propósito en Dios. Toda prueba en Cristo debe de generar algo productivo en nuestra vida.
El desafío consiste en poder “descubrir” el beneficio de las pruebas.
El propósito de Dios en nuestra vida inicia cuando reconocemos el señorío de Cristo en nuestra vida.
Ese primer paso nos abre la puerta a vivir en los planes de Dios. A partir de ese momento todo en nuestra vida tiene un sentido.
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La carta a los Hebreos menciona el gozo que le esperaba a Jesús después de la cruz. Ese gozo que le esperaba después de la cruz le hizo soportar la cruz.
Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios.
El sufrimiento de la cruz fue soportable debido a lo que le esperaba después de sufrir ese padecimiento.
Pueden entenderse muchos beneficios de atravesar por diversas pruebas. Nuestra fe crece, nos hacemos fuertes, nuestro caracter se afirma, etc.
Empecemos por asimilar que en Cristo cada dificultad tiene un beneficio y un propósito.